El coordinador federal de Izquierda Unida, Cayo Lara, ha valorado hoy que la “nueva improvisación” de José Luis Rodríguez Zapatero plasmada en el plan anunciado para recortar el gasto del Estado en torno a los 50.000 millones de euros en tres años supone una “concesión a la derecha política” que lejos de reducir el déficit público servirá para “retrasar y agravar la salida de la crisis”. ffcc
Lara puso en duda que el ajuste duro que supone este plan de austeridad que aprobará mañana el Consejo de Ministros no se vaya a hacer a costa de recortar determinadas partidas del gasto social o del dinero destinado a I+D+i, por mucho que el Ejecutivo haya adelantado que no afectará a las pensiones, prestaciones por desempleo, dependencia o educación. En el caso de la investigación, recordó que nos encontraríamos ante “un recorte sobre un recorte indebido ya realizado”.
En rueda de prensa en la sede federal de IU, su máximo dirigente se preguntó de forma retórica “¿de dónde se va a recortar el gasto público?” y mostró su desconfianza ante la posibilidad de que acabe afectando a “las transferencias a las comunidades autónomas, a la próxima reforma de la financiación de los ayuntamientos, a las inversiones en obra pública o a los gastos corrientes”.
Cayo Lara calificó como “incomprensible” que apenas un mes después de que se hayan aprobado los Presupuestos Generales del Estado Rodríguez Zapatero decida adoptar este duro recorte del gasto. Al tiempo, señaló que este plan “no es creíble porque no va a ayudar a recortar un déficit que puede estar cercano al 10% en 2010”.
Criticó la errática política económica que practica el Ejecutivo socialista ya que, mientras plantea serios tijeretazos al gasto como éste, “el Gobierno no ha querido abordar ni una reforma profunda de la fiscalidad para hacerla más progresiva, ni un plan serio de lucha contra el fraude. Y todo ello cuando se ha anunciado que este año no saldremos de la recesión y el PIB caerá cerca del 0,6%, lo que volverá a reducir los ingresos”.
PACTO SOBRE EDUCACIÓN
Por otro lado, Cayo Lara se refirió también a la propuesta de reforma del sistema educativo realizada horas por el ministro Ángel Gabilondo. Consideró que con ella el Gobierno cede “a la presión que están generando el PP y la jerarquía de la Iglesia” sobre el modelo de educación en España. De igual manera, criticó la forma en que las dos formaciones mayoritarias abordan esta cuestión, a golpe de propuesta ante los medios de comunicación y buscando titulares, sin informar lo suficiente al resto de formaciones políticas, con lo que buscan simplemente “consolidar el bipartidismo en nuestro país”.
“No puede haber Pacto en Educación –señaló- sin la participación y el consenso de la comunidad educativa” y esto debe ser una prioridad incluso por encima de la propuesta de que la reforma deba ser aprobada por mayoría cualificada en el Congreso. Además, insistió en que Izquierda Unida defenderá en este debate de forma nítida que la educación sea “pública y laica en España. En el primer documento del ministro de Educación sobre el pacto no aparecía en una sola ocasión la palabra pública”.
Cayo Lara advirtió de que España “ya tendría que estar en la media de gasto de la Unión Europea en educación. Es insuficiente que los objetivos financieros de este pacto tengan la intención de llegar a equipararnos con la UE en 2015, es decir, que pasemos del 4,92% del PIB actual al 5,4% en ese año 2015, sobre todo en un país donde hay un 33% de fracaso escolar”.
Adelantó que tanto el recorte del gasto del Estado como la inversión en Educación serán dos de los temas que se debatirán en las Jornadas sobre el Nuevo Modelo Productivo que Izquierda Unida celebrará los próximos 6 y 7 de febrero en Madrid. En ellas se contará con la participación de agentes sociales y sindicales para trazar un plan de reforma alternativo a la Ley de Sostenibilidad con la que trabaja el Gobierno.
En estas jornadas se abordarán temas como la Banca Pública o el retraso de la edad de jubilación que propone el Gobierno. Frente a este último asunto, Lara señaló que “jubilarse a los 65 ya está bien” y mostró la total oposición de IU a que se amplíe de forma forzosa la vida laboral.
Lara puso en duda que el ajuste duro que supone este plan de austeridad que aprobará mañana el Consejo de Ministros no se vaya a hacer a costa de recortar determinadas partidas del gasto social o del dinero destinado a I+D+i, por mucho que el Ejecutivo haya adelantado que no afectará a las pensiones, prestaciones por desempleo, dependencia o educación. En el caso de la investigación, recordó que nos encontraríamos ante “un recorte sobre un recorte indebido ya realizado”.
En rueda de prensa en la sede federal de IU, su máximo dirigente se preguntó de forma retórica “¿de dónde se va a recortar el gasto público?” y mostró su desconfianza ante la posibilidad de que acabe afectando a “las transferencias a las comunidades autónomas, a la próxima reforma de la financiación de los ayuntamientos, a las inversiones en obra pública o a los gastos corrientes”.
Cayo Lara calificó como “incomprensible” que apenas un mes después de que se hayan aprobado los Presupuestos Generales del Estado Rodríguez Zapatero decida adoptar este duro recorte del gasto. Al tiempo, señaló que este plan “no es creíble porque no va a ayudar a recortar un déficit que puede estar cercano al 10% en 2010”.
Criticó la errática política económica que practica el Ejecutivo socialista ya que, mientras plantea serios tijeretazos al gasto como éste, “el Gobierno no ha querido abordar ni una reforma profunda de la fiscalidad para hacerla más progresiva, ni un plan serio de lucha contra el fraude. Y todo ello cuando se ha anunciado que este año no saldremos de la recesión y el PIB caerá cerca del 0,6%, lo que volverá a reducir los ingresos”.
PACTO SOBRE EDUCACIÓN
Por otro lado, Cayo Lara se refirió también a la propuesta de reforma del sistema educativo realizada horas por el ministro Ángel Gabilondo. Consideró que con ella el Gobierno cede “a la presión que están generando el PP y la jerarquía de la Iglesia” sobre el modelo de educación en España. De igual manera, criticó la forma en que las dos formaciones mayoritarias abordan esta cuestión, a golpe de propuesta ante los medios de comunicación y buscando titulares, sin informar lo suficiente al resto de formaciones políticas, con lo que buscan simplemente “consolidar el bipartidismo en nuestro país”.
“No puede haber Pacto en Educación –señaló- sin la participación y el consenso de la comunidad educativa” y esto debe ser una prioridad incluso por encima de la propuesta de que la reforma deba ser aprobada por mayoría cualificada en el Congreso. Además, insistió en que Izquierda Unida defenderá en este debate de forma nítida que la educación sea “pública y laica en España. En el primer documento del ministro de Educación sobre el pacto no aparecía en una sola ocasión la palabra pública”.
Cayo Lara advirtió de que España “ya tendría que estar en la media de gasto de la Unión Europea en educación. Es insuficiente que los objetivos financieros de este pacto tengan la intención de llegar a equipararnos con la UE en 2015, es decir, que pasemos del 4,92% del PIB actual al 5,4% en ese año 2015, sobre todo en un país donde hay un 33% de fracaso escolar”.
Adelantó que tanto el recorte del gasto del Estado como la inversión en Educación serán dos de los temas que se debatirán en las Jornadas sobre el Nuevo Modelo Productivo que Izquierda Unida celebrará los próximos 6 y 7 de febrero en Madrid. En ellas se contará con la participación de agentes sociales y sindicales para trazar un plan de reforma alternativo a la Ley de Sostenibilidad con la que trabaja el Gobierno.
En estas jornadas se abordarán temas como la Banca Pública o el retraso de la edad de jubilación que propone el Gobierno. Frente a este último asunto, Lara señaló que “jubilarse a los 65 ya está bien” y mostró la total oposición de IU a que se amplíe de forma forzosa la vida laboral.
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